La desalinización y su importancia

La desalinización es el proceso de eliminación de la sal y otros minerales disueltos del agua de mar o agua salobre para producir agua dulce apta para el consumo humano, la agricultura y otros usos y se lleva a cabo en plantas de desalinización, que emplean diversas tecnologías.

Es común encontrarnos con las palabras desalinización o desalación para referirnos a este mismo concepto, y en ambos casos estaríamos en lo cierto. Según el diccionario de la Real Academia Española, desalinizar es: 1. Quitar la sal del agua del mar o de las aguas salobres, para hacerlas potables o útiles para otros fines. Por otra parte, desalar se define como: 1. Quitar la sal a algo, como a la cecina, al pescado salado, etc. 2. Desalinizar. Por tanto, aunque desalinización es un término más preciso que desalación, se podrían utilizar indistintamente al referirnos al agua.

La importancia de la desalinización en la gestión de recursos hídricos radica en varios aspectos:

1. Acceso a agua dulce adicional: En muchas regiones del mundo, el acceso a fuentes de agua dulce es limitado o insuficiente para satisfacer las demandas crecientes de agua potable por lo que la desalinización proporciona una fuente adicional de agua dulce, reduciendo su dependencia y ayudando a satisfacer las necesidades de las comunidades y la industria.
2. Mitigación de la escasez de agua: En áreas con escasez de agua, como regiones áridas o afectadas por sequías, la desalinización puede desempeñar un papel crucial en la mitigación de la falta de agua. Permite la diversificación de las fuentes de suministro, lo que es esencial para la seguridad hídrica.
3. Seguridad hídrica: La desalinización puede contribuir a la seguridad hídrica al proporcionar una fuente de agua confiable que no depende de factores climáticos impredecibles, como la lluvia. Esto es especialmente relevante en zonas propensas a sequías y variabilidad climática.
4. Aplicaciones agrícolas: La disponibilidad de agua dulce a través de la desalinización es crucial para el riego agrícola, lo que permite mantener la producción de alimentos en áreas con déficit hídrico y contribuye a la seguridad alimentaria.
5. Uso industrial y comercial: Las industrias y empresas que requieren grandes volúmenes de agua para sus procesos pueden beneficiarse de la desalinización, reduciendo la competencia por recursos hídricos limitados.
6. Resistencia al cambio climático: La desalinización es una respuesta importante al cambio climático, ya que el aumento de las temperaturas y las sequías pueden afectar la disponibilidad de agua dulce. La desalinización puede ayudar a garantizar un suministro constante de agua en condiciones climáticas cambiantes.

La necesidad de desalinización suele estar relacionada con la escasez de agua dulce, que puede ser causada por factores como la rápida urbanización, el crecimiento de la población, la sequía, la sobreexplotación de acuíferos, la contaminación del agua y el cambio climático. Las regiones costeras y áridas son las más propensas a enfrentar necesidades de desalinización debido a la falta de acceso a fuentes de agua dulce naturales y la creciente demanda de agua para uso doméstico, agrícola e industrial.

Fuentes de agua salina

Las fuentes de agua salina, principalmente el agua de mar y el agua salobre, son vitales en la consideración de la desalinización. A continuación, se describe cada tipo de fuente de agua salina y las regiones que enfrentan necesidades de desalinización:

1. Agua de mar: El agua de mar es la fuente de agua más común en la desalinización. Contiene una alta concentración de sal (aproximadamente 35,000 partes por millón o ppm) y otros minerales disueltos. La desalinización del agua de mar implica la eliminación de la sal y la conversión del agua en agua dulce. Las regiones costeras y áridas con acceso limitado a fuentes de agua dulce a menudo recurren a la desalinización del agua de mar. Ejemplos de estas regiones incluyen partes de Oriente Medio (como Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos e Israel), el sur de California en los Estados Unidos, Australia y partes de España.
2. Agua salobre: El agua salobre se encuentra en acuíferos subterráneos y fuentes superficiales y tiene una concentración de sal menor que el agua de mar pero mayor que el agua dulce. La concentración de sal puede variar ampliamente y la desalinización del agua salobre implica la eliminación parcial de la sal. Las regiones que enfrentan problemas de contaminación de acuíferos o que dependen en gran medida de fuentes de agua subterránea salobre pueden requerir el proceso de desalinización. Esto incluye áreas costeras, zonas de agricultura intensiva y áreas con intrusiones de agua salina en acuíferos.
3. Otras fuentes de agua salina: Además del agua de mar y el agua salobre, existen otras fuentes de agua salina menos comunes, como lagos salinos y aguas residuales salinas. La desalinización de estas fuentes puede ser necesaria en situaciones específicas. Las regiones que enfrentan problemas de contaminación de cuerpos de agua dulce o que desean reutilizar las aguas residuales tratadas pueden considerar la desalinización de estas fuentes, aunque es menos común que la desalinización del agua de mar y el agua salobre.