Entre marzo y septiember de 1905, el buzón de la revista científica alemana "Annales der Physik" recibió cuatro estudios que cambiarían para siempre las leyes de la física y, en definitiva, la concepción de la realidad de la luz, de la materia, del tiempo y del espacio.
El autor era un joven de 26 años llamado Albert Einstein y que, en aquel momento, trabajaba en la oficina de patentes de Berna (Suiza). Su carrera como físico estaba estancada tras el rechazo de su tesis doctoral y su pasión científica había quedada relegada a sus ratos libres y a las largas horas muertas en la oficina. Sin embargo, este año fue milagroso para Einstein con estos cuatro grandes logros:
PRIMER ESTUDIO - EFECTO FOTOELÉCTRICO
El 9 de junio de 1905, la revista publicó las disertaciones de Einstein sobre el efecto fotoeléctrico y la física de la luz con el título "Un punto de vista heurístico sobre la producción y transformación de la luz". En él introduce la revolucionaría idea de que la luz está compuesta tanto de energía como de partículas cuantificables a los que llamó quantos (fotones para la historia).
Esta concepción de que los sistemas físicos pueden comportarse a la vez como ondas (energía) y como partículas (materia) sería la semilla de uno de los dos pilares de la física moderna: la mecánica cuántica.
Dieciséis años después, esta teróra sobre el efecto fotoeléctrico llearía a Albert Einstein a la cima de la ciencia cuando, en 1921, recibe el Premio Nobel de Física.
SEGUNDO ESTUDIO - MOVIMIENTO BROWNIANO
El segundo fue publicado el 18 de julio con el título "Sobre el movimiento requerido por la teoría cinética molecular del calor de pequeñas partículas suspendidas en un líquido estacionario".
Einstein encontró en un fenómeno físico (el movimiento browniano) la evidencia empírica de lo que muchos científicos pensaban en aquella época de que la materia está compuesta de átomos. Al intentar explicar ese curioso fenómeno, Einstein no solo confirmó matemáticamente la existencia de los átomos y las molécualas sino que,por su manera de hacerlo, inauguró un nuevo campo en el estudio de la Física, la Física Estadística.
TERCER ESTUDIO - RELATIVIDAD ESPECIAL
El tercer estudio de aquel año fue quizás el más prometedor. Trataba sobre "La electrodinámica de los cuerpos en movimiento" y fue publicado el 26 de septiembre de 1905.
Supuso la condensación de la neuva física de Einstein en la conocida teoría de la relatividad especial, que precedería ala relatividad general (que, en 1915, incluyó también la influencia de la aceleración y la gravedad). Einstein postuló en este estudio que la velocidad de la luz es inmutable, constante e independiente del movimiento del obserador. Por tanto, a excepción de la constante de la velocidad de la luz, todo es relativo, incluyendo el tiempo, la distancia o la masa.
CUARTO ESTUDIO - EQUIVALENCIA ENTRE MASA Y ENERGÍA
El 21 de noviembre se publicó el último de los cuatro estudios titulado con la pregunta: "¿Depende al inercia de un cuerpo de la energía que contiene?". Es un epílogo de todos los demás estudios en que la demostración matemática de la relatividad específica y, por tanto, la constatación de la equivalencia entre la materia y la energía, quedaron condensados en al fórmula más famosa de la historia: E = mc2.
Quizás llege una nueva revolución científica que descarte algunas ideas de Einstein, no obstante, perdurará para siempre su método.
El gran mérito de Einstein no fue intentar explicar los resultados o los experimentos en sí, sino elaborar una teoría en la que el experimento es el resultado y no el origen de un fenómeno.