El OIEA lleva más de 60 años apoyando el uso seguro y eficaz de las técnicas nucleares en la medicina en todo el mundo. Cuando están disponibles, estas técnicas pueden ayudar a diagnosticar, tratar y gestionar una amplia gama de enfermedades.Saber más
En la medicina, las radiaciones ionizantes se usan tanto para el diagnóstico, ya que permiten obtener imágenes del interior de las personas, como para el tratamiento de algunas enfermedades.Saber más
Las pruebas de diagnóstico en las que se emplea radiación son un instrumento inestimable para manejar muchas otras enfermedades, entre ellas las que afectan a los pulmones (asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica); los riñones (cálculos, pielonefritis); el hígado y la vesícula biliar; el páncreas; el sistema linfático, y el aparato locomotor.Saber más
La medicina nuclear utiliza diferentes tipos de isótopos para sus aplicaciones diagnósticas y terapéuticas. La elección de los mismos está condicionada por la necesidad de que no sean tóxicos, tengan un tipo de emisión radiactiva idónea, baja energía y período de semidesintegración corto, para que la dosis absorbida sea pequeña. Su eliminación debe ser rápida para que el tiempo de permanencia en el organismo no sea prolongado.Saber más
PET significa nada menos que tomografía de emisión de positrones, y es una técnica que involucra a muchas ramas de la ciencia como las matemáticas, la física, la química, la biología, la bioquímica, la farmacia, y por supuesto, la medicina.Saber más
La revolución que supuso la introducción de la tomografía computarizada en el diagnóstico médico, en muchas ocasiones se compara con el propio descubrimiento de los rayos X por parte de Roentgen. Las ventajas que mostraban las imágenes que producía cambiaron de forma radical la práctica radiológica. Por fin, las estructuras internas del paciente podían verse sin el solapamiento que experimentan en la radiología convencional. Además, era la primera aplicación de los procedimientos digitales en el campo de la física médica.Saber más